Recuperado un reloj de la Torre de las Campanas
El Museo Diocesano y Catedralicio suma una nueva pieza: un antiguo reloj de la Torre de las Campanas que con el paso del tiempo, había dejado de utilizarse y prácticamente, estaba en el olvido y en un mal estado de conservación.
La electrificación de las campanas y con ella, la desaparición de los campaneros que vivían en la parte alta de la Catedral, supuso que estas piezas dejaran de utilizarse, dejaron de tener un función.
La restauración de esta pieza, que según recordaba el deán, Ángel Olivera, llegó a la seo civitatense sobre el año 50, ha sido un tanto curiosa pues fue una de las personas que ha trabajado en la gestión turística de la misma la que se interesó por recuperar la pieza una vez que concluyó su trabajo.
En concreto, Demetrio Gómez, junto con parte de su familia, Gómez Pizarro, ha sido el encargado de recuperar este reloj a los largo de 15 días y más de 200 horas de trabajo, según relataron durante la presentación de la pieza.
Aseguran que el reloj podría, incluso, funcionar pero evidentemente, ese ya no será su uso, sino estar expuesto para que lo vean todos los visitantes de esta Catedral de Santa María de Ciudad Rodrigo.
Esta misma familia también ha construido una urna de metacrilato para proteger el reloj, que pesa unos 150 kilogramos, y que es como se expone en la planta baja del Museo Diocesano.
En la presentación de la pieza, los restauradores, «aficionados a la maquinaria», mostraron un dossier en el que se aprecia el proceso de restauración y en el que se ve reflejado todo el trabajo que han tenido que realizar y el mal estado en el que se encontraba el reloj, sobre todo, debido a la suciedad.
El propio deán de la catedral recordaba que la llegada de este reloj a la seo fue muy sonado en su momento «y yo que estaba en el seminario, lo recuerdo».