En una mañana que comenzó fría y con niebla, ha tenido lugar en Fuenteguinaldo el retiro de inicio de curso del Arciprestazgo de Águeda sobre el tema “Acompañar a las familias”. De manera ordinaria, este encuentro se celebra en Casillas de Flores, pero se trasladó al hermoso centro pastoral de Fuenteguinaldo, buscando un lugar más espacioso debido a la pandemia.
El Obispo Administrador Apostólico, Mons. Jesús García Burillo, insistió en la conveniencia de atender a las familias en sus necesidades concretas, tal como hizo Jesús en las bodas de Caná; enseñando en los caminos, en la montaña, en el lago; curando enfermedades de todo tipo a multitudes: cojos, sordos, lisiados, leprosos, a la hemorroísa; acompañando a mujeres, muchas de las cuales habían sido curadas por Él; llamando a algunos para que pudieran continuar con su misión y entregándose por entero hasta la muerte; para asegurarles después de la pascua: “y yo estoy con vosotros todos los días hasta el fin de mundo”.
También expuso el proceso que siguió Jesús acompañando a la Samaritana que, comenzando con gran distancia por parte de la mujer, al ofrecerle un “agua viva” y preguntarle por su estado de vida personal, terminó siendo la primera mujer apóstol que anunciaba a sus paisanos la llegada del Mesías.
A continuación, hubo un largo tiempo de oración en silencio y en manifestación oral.
En la segunda parte, después de la exposición general del programa pastoral, hecha por el Vicario, Gabriel Ángel Cid, el anterior delegado de pastoral familiar, Javier Ramos, informó de las abundantes actividades ofrecidas a las familias para este curso: convivencias, charlas, rutas familiares por el campo, Escuela de Familias, acogida a las familias que bautizan a sus hijos, acogida a las familias que han sufrido una ruptura, formación de un equipo que pueda ayudar a familias en dificultades, cineforum con “Matrimonios de cine”, grupo de oración de madres, iniciar en la oración a niños (oratorio); etc… La exposición terminó con un animado diálogo, cuando el sol ya aparecía con toda su fuerza en todo lo alto.