Las parejas de novios que se contraerán matrimonio próximamente en la Diócesis de Ciudad Rodrigo han podido disfrutar de una formación para preparase al matrimonio, diferente en muchos aspectos. A pesar de venir marcada una parte por la pandemia y tener que hacer algunas sesiones online, finalmente han podido disfrutar de un día de convivencia en el Seminario.
Fue un día especial donde la oración, la escucha a las parejas, las dinámicas y los testimonios han marcado una jornada diferente. «Las jóvenes parejas demandan más escucha por parte del resto de miembros de la Iglesia», informan desde la Delegación de Familia. Ven en los testimonios, la realidad de una vida vivida con fe, donde todo se puede superar y donde la alegría de la familia cristiana es posible en el mundo de hoy.
Al terminar pudieron valorar estas sesiones y la jornada de convivencia. Todos apuntaban que no se esperaban encontrarse con momentos tan especiales, que les gustaría tener más momentos así, una vez casados para compartir con otros matrimonios temas como la crianza de los hijos, la transmisión de la fe y su propia vivencia como esposos cristianos.
Además pudimos contar con la presencia de D. Jesús García Burillo, Obispo Administrador Apostólico; D. Antonio Risueño, consiliario. D. Andrés Bajo en el momento de la oración y un nutrido grupo de colaboradores y miembros del equipo de la Delegación de Familia.