El Obispo de Ciudad Rodrigo, Mons. José Luis Retana, ha participado este sábado en el retiro del mes de marzo del Arciprestazgo de Ciudad Rodrigo, que ha tenido lugar en el Seminario.
Ha sido el primer retiro desde que don José Luis llegara a la Diócesis y a lo largo de este mes se han programado un total de cinco.
En todas las ocasiones el encuentro se abre con una oración y después, toma la palabra el Obispo que ofrece unas palabras para la reflexión.
Mons. Retana ha invitado a los presentes a mantener «la fidelidad en lo cotidiano».
«Lo que parece insignificante se convierte en una realidad visible un día, cuando Dios quiere», matizó.
Hizo especial hincapié en la importancia de las cosas que, a priori, pueden parecer pequeñas como una sonrisa, un gesto o el tiempo de conversación, «cosas que no se valoran».
Recordó con sus palabras que «nuestra tarea está llena de sentido, no tenéis que buscar lo extraordinario».
Además animó a que esta
Cuaresma «no sea una más» y para que esto suceda y se renueve nuestra conciencia, «lo importante no es lo que yo soy capaz de hacer sino ser consciente de lo que otro es capaz de hacer por mí». Ese otro es el Señor.
En un curso centrado en el Sínodo, el Vicario de Pastoral, D. Gabriel Ángel Cid, explicó algunos aspectos en relación a cómo se está trabajando en esta fase diocesana.
Para el Obispo, «solo estando juntos, eso ya es sinodalidad, aunque no hayamos contestado a las preguntas».