La Diócesis de Ciudad Rodrigo se une a la inquietud que en estos momentos están viviendo los vecinos de Monsagro que, ante la magnitud del incendio que afecta de manera especial a la provincia de Cáceres, han tenido que abandonar sus casas.
En primer lugar, rezamos por todos ellos y por los efectivos que a esta hora siguen trabajando en la extinción del incendio.
La Diócesis a través de su Obispo, Mons. José Luis Retana, se ha puesto a disposición de las autoridades, tal y como se lo ha transmitido al alcalde de Ciudad Rodrigo, Marcos Iglesias, que en el momento de la comunicación se encontraba en uno de los pabellones de la localidad al que han sido trasladados muchos de los vecinos hasta que la situación permita un pronto regreso a sus casas.
El párroco de Monsagro, D. Efraín Peinado, también está viviendo estos momentos junto a esas personas para brindarles su apoyo y cercanía.
El drama de los incendios forestales, tanto desde el punto de vista humano como desde el ecológico, nos invita, una vez más, a reflexionar sobre el “desafío urgente de proteger nuestra casa común”, unas palabras que nos recuerda el para Francisco en su encíclica Laudato Si.
Que la Virgen de la Peña de Francia consuele a todos los afectados y nos ayude a ver pronto cómo renace la vida donde ahora hay llamas.