La Delegación diocesana para el Clero es un organismo pastoral de la Diócesis constituido por el Obispo con el encargo de cuidar, promover y coordinar todas las cuestiones referentes a la vida, formación y acompañamiento humano y espiritual de los presbíteros en la Diócesis. También tiene como objetivo primordial favorecer la relación personal del Obispo con el Clero y la atención asidua a las necesidades específicas de cada presbítero.
Para ello, se propone a lo largo de cada curso pastoral el cumplimiento de cuatro objetivos principales:
- Conocer la situación personal, las necesidades, esperanzas y preocupaciones de los presbíteros en su entorno personal, pastoral y social
- Impulsar y fomentar la vida evangélica, la entrega plena al ministerio apostólico y la formación permanente de los presbíteros
- Promover y favorecer la comunión y fraternidad entre todos los miembros del presbiterio diocesano
- Programar y coordinar las acciones encaminadas al cumplimiento de los fines propios de la Delegación en colaboración con la Vicaría de Pastoral