La Subcomisión Episcopal para la Familia y Defensa de la vida ha desarrollado del 4 al 7 de julio, un curso de formación de agentes de Pastoral de Familia y Vida que ha tenido lugar en Guadarrama (Madrid). Este año se ha abordado el tema de la Pastoral de la vida humana a la luz de la declaración Dignitas infinita, con el objetivo de ofrecer, además de contenidos teológicos, propuestas para que en las diócesis se implemente esta Pastoral.
A este encuentro han acudido los delegados de Familia y Vida de la Diócesis de Ciudad Rodrigo, D. Daniel Mielgo y Dña. Teresa Anciones.
Una pastoral de la vida humana
El presidente de esta Subcomisión, Mons. José Mazuelos, fue el encargado de presentar el curso y de la primera ponencia: «La urgencia de una Pastoral de la vida humana, a la luz de la declaración Dignitas infinita«.
En este curso también ha intervenido el director del departamento de Pastoral de la Salud, D. José Luis Méndez, que habló sobre el cuidado como clave de la Pastoral de la vida humana. La directora del Instituto de Bioética de la Universidad Francisco de Vitoria, Dña. Elena Postigo, se centró en la Pastoral al inicio de la vida humana. También se desarrolló trabajo por grupos y un Videofórum.
Tampoco han faltado en este encuentro la exposición de experiencias, en concreto, una sobre prevención, formación y acompañamiento en torno a la violencia sobre personas en situaciones de vulnerabilidad. Y otra, sobre cyberbulling, adicciones y suicidios: herramientas para la prevención y ayuda de niños, adolescentes y jóvenes. También se presentaron experiencias, en dos comunicaciones, sobre los materiales de los «Itinerarios Catecumenales para la vida matrimonial».
Una ponencia sobre la Pastoral al final de la vida humana de la mano de D. Jacinto Bátiz, médico especialista en cuidados paliativos y experto en ética y deontología médica, abrió la última jornada.