El Obispo Administrador Apostólico, Mons. Jesús García Burillo, ha presidido en la parroquia de El Salvador de Ciudad Rodrigo, el inicio del triduo a San José, tal y como indicó «en nombre de toda la Diócesis de Ciudad Rodrigo, poniéndola bajo el amparo y la protección de San José».
Recibido por el párroco de El Salvador, D. José María Rodríguez-Veleiro, el prelado indicó que este triduo es el modo de «prepararnos a la celebración del jubileo, que recibiremos con la indulgencia plenaria en la solemnidad de San José». Esta preparación comienza hoy, «con la invitación a la renovación de nuestro bautismo», dijo D. Jesús, quien recordó que en las lecturas aparecen dos imágenes del bautismo. Una de ellas es «el gran torrente que nace del templo de Jerusalén, que llega hasta el mar Muerto y vivifica las aguas».
La segunda imagen es «la del enfermo durante 38 años que está esperando que alguien le ayude a bañarse en la piscina de Bethesda, junto al templo de Jerusalén. El Señor lo cura, por lo tanto, como efecto de la relación con las aguas y del poder del Señor recupera la salud».
García Burillo recordó que «los frutos que la Iglesia nos invita a vivir en esta preparación para esta fiesta de San José es: permanecer como San José como custodios de la familia y como custodios de la Iglesia. El Señor, a través del Santo Padre, el primer día del año nos invitó al cuidado de la familia, de los demás».
Hizo referencia a que San José ha afrontado «todos los grandes retos que tuvo en su familia» por lo que invitó a que «vivamos en custodia, en cuidado continuo de las personas a las que el Señor nos ha encomendado».