La capilla de Santa Marina, en Ciudad Rodrigo, ha acogido este miércoles la Vigilia Joven de la Inmaculada, una actividad en la que han participado unas 60 personas entre las que se incluían personas de la propia parroquia y jóvenes llegados de otros puntos de la ciudad.
La Vigilia, presidida por el consiliario de la Pastoral Juvenil, D. Efraín Peinado, se ha dividido en seis partes en las que se ha utilizado una cuerda como símbolo de la propia vida.
Las cinco primeras partes giraban alrededor de los momentos más importantes de la vida de María con Jesús.
El último momento era la vida de los allí presentes, cuando uno se deja llenar por Jesús y María y la vida se convierte en luz. Ese momento se ha simbolizado con el encendido de una pequeña vela por parte de los participantes, que se han acercado al cirio para así iluminarse con la luz de Jesús y salir a anunciarle.
El delegado de Pastoral Juvenil, D. José Manuel Gallego, ha conducido la actividad que se ha convertido en un bonito momento de oración.