Las casas parroquiales de Águeda y Aldea del Obispo se convierten en viviendas sociales tras la colaboración entre Junta y Obispado

«Este es el espléndido resultado de la colaboración entre las administraciones y la Iglesia, entre la Junta de Castilla y León y la Diócesis de Ciudad Rodrigo». Con esas palabras resumió el Obispo Administrador Apostólico, Mons. Jesús García Burillo, la transformación que se ha llevado a cabo en las casas parroquiales de Águeda y Aldea del Obispo que a partir de ahora, tendrán un carácter social.

D. Jesús manifestó, en el acto de inauguración de las viviendas, que este es un trabajo «por la fraternidad», especialmente, por la fraternidad de las familias y los pueblos y se mostró convencido de «seguir juntando fuerzas al servicio del bien común».

En total, esas antiguas casas rectorales se han transformado en tres viviendas rehabilitadas por la Junta para incorporarlas al parque público de vivienda dedicada al alquiler social de Castilla y León, con una inversión global de 170.000 euros, de los que 20.000 euros han sido aportados por la Diócesis. Son tres viviendas cedidas por el Obispado de Ciudad Rodrigo, de las 22 cedidas hasta ahora en la Comunidad por la Iglesia Católica.

En esta visita a las viviendas de Águeda y Aldea del Obispo en la que ha participado don Jesús, también han estado presentes el consejero de Fomento y Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones; el alcalde de Ciudad Rodrigo, Marcos Iglesias; la alcaldesa de Aldea del Obispo, Rosa Baz; el presidente de la Diputación de Salamanca, Javier Iglesias; el delegado territorial de la Junta, Eloy Ruiz, y el secretario general de la Consejería de Fomento y Medio Ambiente, Ángel Marinero.

Una vivienda en Águeda

Situada en la Plaza Mayor del pueblo, la antigua casa parroquial de Águeda estaba deshabitada y su estado de conservación en general era bastante precario. Tras la rehabilitación, la vivienda resultante, con una superficie útil de 90,4 metros cuadrados, cuenta con salón-cocina, tres dormitorios, entrada, baño, aseo y porche.

Las obras de rehabilitación ejecutadas han sido: desmontado de solado, tabiquería, instalaciones, aparatos de cocina y baño; realización de nueva solera, aislamiento en toda la vivienda, nueva tabiquería; guarnecido y enlucido de paramentos verticales; enfoscado en cuartos húmedos; saneado y retejado de cubierta con aislamiento e impermeabilización; colocación de falso techo de escayola; alicatado y solado de gres; carpintería exterior de ventanas de PVC y carpintería interior de madera de roble; pintura de todas las fachadas; instalaciones nuevas con caldera estufa de pellets, calentador eléctrico; instalación de antena, toma de tierra, televisión y telefonía; aparatos sanitarios; amueblamiento de cocina e instalación de equipamiento básico. La inversión realizada en esta nueva vivienda ha sido de 50.000 euros.

 

2 viviendas en Aldea del Obispo

La casa rectoral de Aldea del Obispo ha sido transformada en dos viviendas, con entrada por la calle Iglesia y por la Plaza Mayor, respectivamente.

Se trata del edificio correspondiente a la casa parroquial que tiene forma de “U” y cuenta con la casa parroquial propiamente dicha y un anexo destinado a cochera. La casa está dividida en dos partes, la principal que es la que se utilizaba como tal y la secundaria con acceso a la planta superior y al desván existente. Ambas partes tienen acceso independiente a través de un amplio patio al que se accede desde la vía pública. La parte principal tenía una superficie útil de 142,84 m² en planta baja, de 48,30 m² en planta primera y de 97,77 m² en planta bajo cubierta. La parte secundaria tenía una superficie útil de 21,06 m². Su estado de conservación era precario, presentando diversas patologías.

A través del programa Rehabitare de 2018 se ha construido una primera vivienda, actuando en la parte izquierda del edificio, manteniéndose la distribución global y realizándose pequeñas modificaciones para hacerla más funcional. La vivienda tiene una superficie útil de 102,30 m² y construida de 136,10 m², que se distribuyen en una entrada, salón, cocina, cuarto de caldera, tres dormitorios, baño, distribuidor y porche.

A través del programa Rehabitare 2020, se ha construido una segunda vivienda, con una superficie útil de 92,71 m², que se distribuyen en planta baja en salón-cocina, baño, entrada, escalera y distribuidor y en planta primera en distribuidor y escalera, cuatro dormitorios y baño. Las zonas de la antigua entrada y de la cochera quedan vinculadas a la vivienda de esta actuación con una superficie útil 38,00 m².

Las obras de rehabilitación ejecutadas en ambas viviendas han sido: desmontado solados, tabiques, carpinterías interiores y exteriores, instalaciones, escalera, falso techo…; realización de solera de hormigón e impermeabilización de tabiques existentes; nueva tabiquería; guarnecido y enlucido de paramentos verticales y enfoscado en cuartos húmedos; apertura hueco en muro para ventana; tratamiento antixilófagos en madera techo en la despensa; retejado de la cubierta existente; alicatado, solado, carpintería exterior de PVC, carpintería interior de madera de roble; picado de fachadas exteriores, de la puerta de entrada e interiores, con aplicación de mortero hidrófugo y pintura hidrófuga; instalaciones de saneamiento, fontanería, y electricidad. Instalación de calefacción con caldera de pellets y radiadores de aluminio; calentador eléctrico. Instalación de antena; aparatos sanitarios; amueblamiento de cocina e instalación de equipamiento básico.

El presupuesto de inversión de las dos viviendas construidos en el inmueble de la casa rectoral de Aldea del Obispo es de 120.194 euros, de los cuales el Obispado ha aportado 20.151 euros.

Estas tres viviendas, que han supuesto una inversión global de 170.000 euros, se suman al programa Rehabitare que viene desarrollando la Junta de Castilla y León con el objetivo de recuperar aquellas viviendas de titularidad municipal y eclesial que se encuentran abandonadas y cuya rehabilitación y recuperación es interesante para el medio rural. Las viviendas se ubican por lo general en los cascos urbanos, lo que permite contar con todo tipo de servicios, optimizando así las infraestructuras existentes y evitando el deterioro de un patrimonio municipal y de la Iglesia.

Además, en el caso de Aldea del Obispo y de manera paralela a esa inversión, la Diócesis ha habilitado un salón parroquial.