El Obispo, Mons. José Luis Retana, ha presidido esta mañana en el Seminario, la fiesta de Jesucristo Sumo y Eterno Sacerdote en la que los sacerdotes han dado gracias por su vocación y ministerio.
De manera especial, han festejado sus bodas de oro sacerdotales el Rvdo. D. José Sánchez Arroyo y también el Rvdo. D. Luis Ignacio Durán Sánchez, este último, diocesano de Salamanca, pero natural de la localidad de El Bodón.
Don José Luis se ha dirigido de manera especial a estos dos sacerdotes a los que ha dicho: «Cada uno de vosotros sois hechura de las manos de Dios, que con su gracia ha ido tejiendo en vosotros una vida al servicio de aquellos a los que habéis sido enviados. Cada uno en vuestra propia historia, en la que hoy sobresale la fidelidad, sois el reflejo de una creatividad del Espíritu y de la misión de la Iglesia, en la que habéis ejercido el ministerio».
A todos los presentes les ha recordado que al celebrar hoy esta fiesta de Jesucristo Sumo y Eterno Sacerdote, «debemos reconocer que no tenemos otro camino para ejercer nuestro ministerio sacerdotal como desea la Iglesia, que la obediencia a la voluntad divina en nuestras vidas. Habiendo recibido el sacramento del Orden, estamos vinculados a Cristo de una manera íntima, personal y existencial. En esta vinculación está la fuente de nuestra santificación esa gracia que debemos pedir cada día y por la que el pueblo cristiano suplica en esta jornada para cada uno de nosotros».
Después de la Eucaristía el salón Obispo Mazarrasa ha acogido la charla titulada ‘La parroquia al servicio de la sinodalidad” (2ª parte), que ha pronunciado D. José San José Prisco.
Esta fiesta conmemora en este 2023, los 50 años de su concesión a España por parte de la Santa Sede, por lo que desde 1973 quedó incluida en el calendario litúrgico nacional, el jueves posterior a Pentecostés.