El Museo Diocesano y Catedralicio cuenta desde hoy, con el anillo de la consagración episcopal de Mons. Antonio Ceballos Atienza, además de una casulla y una mitra de su propiedad.
Estos objetos, de gran valor sentimental, fueron recogidos el pasado martes, 21 de septiembre, por el canónigo, D. Tomás Muñoz y el sacerdote, D. Juan Carlos Sánchez que se trasladaron a la Residencia de las Hermanitas de los Pobres de Jaén donde reside actualmente, el que fuera obispo civitatense.
En el acto de entrega se firmó un documento redactado por Mons. Ceballos. Firmaron el documento el mismo Mons. Antonio Ceballos, el Vicario General de la diócesis de Jaén, D. Francisco Juan Martínez Rojas, el sacerdote de Jaén D. Antonio Pérez y los sacerdotes civitatenses mencionados. En el acto estaba presente el secretario particular de Mons. Ceballos, D. José Antonio Barroso Torres.
«El acto fue especialmente emotivo para todos los presentes. Como es bien conocido de todos, Mons. Antonio Ceballos recibió la ordenación episcopal en la Catedral civitatense el 25 de marzo de 1988 y estuvo al frente de la de la diócesis hasta el 10 de diciembre de 1993 en que fue nombrado obispo de Cádiz y Ceuta, tomó posesión de esta diócesis el 29 de enero de 1994, donde ha permanecido como obispo hasta el 30 de agosto de 2011, fecha en que fue aceptada su renuncia por edad en conformidad con el canon 401/1 del Código de Derecho Canónico, convirtiéndose en emérito y retirándose a descansar en la residencia de las Hermanitas de los Pobres de Jaén», recordó Muñoz.
El anillo episcopal que recibió en la ordenación fue regalo de todo el presbiterio diocesano. Es un anillo de oro realizado por el artesano mirobrigense Miguel ‘el Joyero’, con la inscripción ‘in ómnibus caritas’, lema de su episcopado y con la fecha de su consagración episcopal.
«Es ciertamente un regalo emotivo y simbólico, signo del amor que siempre profesó D. Antonio Ceballos a la diócesis donde nació como obispo. La casulla y la sencilla mitra son también otro detalle de esta estima, que quedarán a disposición de las celebraciones en la Catedral», manifestó el mismo sacerdote.
En este acto en el que se oficializó la entrega de estas pertenencias, el Obispo Administrador Apostólico, Mons. Jesús García Burillo, dijo que «para toda la Diócesis y para mí concretamente, es un símbolo de mucha calidad y de mucha generosidad y de comunión eclesial». Definió a Mons. Ceballos como una persona de «inteligencia privilegiada» y «siempre se ha movido con una atención especial hacia los sacerdotes».
El presidente del Cabildo, D. Ángel Martín, concluyó que «más que el valor que pueda tener desde el punto de vista crematístico, es el valor afectivo».
