En medio de un gran interés, los fieles de Vilvestre han acogido al joven párroco Miguel Ángel García. Le ha acompañado el Obispo Administrador Apostólico que ha presidido la toma de posesión, junto con el Arcipreste hasta ahora Administrador parroquial, el Rector del seminario y varios compañeros sacerdotes.
Miguel Ángel, con dos años de ministerio sacerdotal, añade la nueva parroquia a las de Cerezal, Mieza y Saucelle, de las que es actualmente responsable. Sucede como párroco a Don Victorino García Benito, quien durante cuarenta años ha servido generosamente a esta parroquia, fundando una conocida residencia de mayores, y ha renunciado por edad el pasado mes de mayo.
A la celebración han asistido sus padres y familiares con emoción oculta por las mascarillas, el Sr. Alcalde, que le dio una bienvenida cordial y su promesa de colaboración, con la corporación municipal, la comunidad de Marta y María, y numerosos fieles protegidos convenientemente con mascarillas y distancia social, por respeto a las normas sanitarias, las cuales imprimen austeridad al acto, pero no la privan de calidez y belleza.
El nuevo párroco ha expresado su deseo de servir con entusiasmo a esta nueva comunidad, unida a las parroquias que actualmente atiende. En sus primeras palabras se ha ofrecido a los fieles a “caminar juntos en una sociedad difícil y sufrida”. El Obispo le ha animado a ejercer su ministerio dedicándose en especial a las familias, a los jóvenes, a los ancianos y a los más pobres, con un espíritu jovial como corresponde a su edad y a su disposición llena de gozo y esperanza.